22 abril 2021

Objetivo recuperación: una apuesta por el sistema alimentario II

En el Plan de Recuperación del Gobierno de España, recientemente adelantado por el Presidente del Gobierno, se recogen, en forma de titulares, los gastos vinculados a la acción prevista para conseguir la Transformación ambiental y digital del sistema agroalimentario y pesquero con los fondos procedentes del instrumento financiero Next Generation EU. A tal fin, entre reformas e inversiones anunciadas, se destinarán 1051 millones de euros en los próximos ejercicios.

El texto gubernamental justifica esta cifra en la importancia estratégica demostrada, una vez más, por el sector agroalimentario durante la pandemia, al haber permitido el acceso de la población a un suministro de alimentos estable en cantidad, precio y calidad. Es además señalado como un sector clave para afrontar el reto demográfico y el equilibrio territorial entre las áreas rurales y las urbanas, y se destaca su contribución además a equilibrar la balanza comercial de España, con unas exportaciones que superan los 53.700 millones de euros y un saldo positivo de 14.600 millones. Por todo ello y para mejorar todavía más su comportamiento futuro, se considera que debe seguir transformándose y adaptándose para responder a los retos de la globalización, de la digitalización y del cambio climático y para atender las necesidades de una población cada vez más concienciada con la producción sostenible y la calidad de los alimentos. Para ello, se busca mejorar el funcionamiento de la cadena alimentaria, fomentar la innovación y la eficiencia energética y lograr un mejor uso de los recursos, especialmente de los hídricos. En concreto, las actuaciones recogidas se centran en aspectos como la mejora del uso sostenible de los suelos agrícolas, el fomento de la digitalización y de la economía circular y la modernización de los regadíos, para reducir el uso de los recursos naturales y de insumos agrícolas y mejorar la competitividad y sostenibilidad del sector agrario. En el ámbito pesquero, se busca fortalecer la red de reservas marinas de interés pesquero, impulsar la investigación pesquera y oceanográfica e incidir en la lucha contra la pesca ilegal y, en suma, facilitar las inversiones en la modernización del sector.

Reformas previstas

Son varias las reformas previstas que se enmarcan en la modernización y mejora del sector alimentario. La primera de ellas es la modificación de la normativa reguladora de las relaciones comerciales en la cadena alimentaria (Ley 12/2013), para lograr “un mejor equilibrio en el reparto de beneficios entre productores y distribuidores”. También se prevé el desarrollo y revisión del marco regulatorio en materia de sostenibilidad ambiental de la ganadería, centrada en la renovación de los requisitos de ubicación, distancia, tamaño, condiciones sanitarias e infraestructuras de bioseguridad, medioambientales y de bienestar animal en las granjas. Igualmente está previsto abordar el marco legislativo sobre la nutrición sostenible en los suelos agrícolas y normativa específica sobre contaminación de origen agrario. A tal efecto, se tiene pensado abordar la regulación de las labores de fertilización para reducir el aporte innecesario de nutrientes a los suelos agrícolas, fomentando el asesoramiento técnico y la ayuda a los agricultores para reducir la contaminación de aguas por nitratos y fosfatos y mejorar la calidad del aire.

Otra de las reformas incluidas es el impulso a la gobernanza y a la sostenibilidad de las inversiones en los regadíos españoles, mediante el establecimiento de un mecanismo de gobernanza a nivel nacional que permita a todos los representantes de los sectores afectados cooperar en la mejora del regadío español.

Se completa la lista de reformas previstas por el Plan con la revisión del marco normativo nacional para la regulación de la pesca sostenible, que pretende impulsar la sostenibilidad económica y social como elemento central de la gestión pesquera, y que agrupará en una única ley la normativa actualmente dispersa adaptando la ordenación de los diferentes artes, modalidades y censos de los caladeros. Por último, se destaca la ejecución efectiva del II Plan de Acción de la Estrategia de Digitalización del sector agroalimentario y del medio rural,.

Inversiones en curso

Las inversiones contenidas en el proyecto presentado son muy numerosas. Constan de la puesta en marcha de una serie de planes, considerados por el Gobierno de España como necesarios para el objetivo de transformación sectorial trazado.  El de mejora de la eficiencia y la sostenibilidad en regadío, busca la modernización de regadíos, con el objetivo de promover el ahorro de agua y la eficiencia energética, instalando sistemas de riego más eficientes y en muchos casos haciendo uso de fuentes de aguas no convencionales.

Por su parte, el de impulso de la sostenibilidad y competitividad de la agricultura y la ganadería se divide en tres partes. La primera aborda la modernización y mejora de las capacidades de lucha contra las enfermedades de los animales y las plantas a través del refuerzo de los laboratorios oficiales, mientras que la segunda se detiene en obtener el refuerzo de los sistemas de capacitación y bioseguridad en viveros y explotaciones ganaderas, mejorando la prevención de enfermedades animales y plagas vegetales. Se completa este ambicioso plan con la optimización en la gestión de residuos ganaderos, la mejora de la eficiencia energética a través de la economía circular y la modernización integral de invernaderos.

Las inversiones siguen con la estrategia de desarrollo de la digitalización y el emprendimiento del sector agroalimentario y forestal y del medio rural.

Planes específicos del sector pesquero

La lista de inversiones se cierra con las acciones previstas para el impulso de la sostenibilidad, investigación, innovación y digitalización del sector pesquero. Las actuaciones propuestas comprenden la modernización de la red de reservas marinas de interés pesquero y el impulso a la investigación y formación en el sector. También se quiere incluir el fomento del desarrollo tecnológico y la innovación en el sector pesquero y acuícola, para el impulso de la economía azul, y la digitalización de los medios para la vigilancia de la flota pesquera.

Completan los planes de transformación del ámbito pesquero los gastos previstos para apoyar la lucha contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada, así como el impulso a la financiación del sector pesquero, “para la mejora de la competitividad, las condiciones laborales y la seguridad abordo”, concluye el texto oficial.